Ante el reinado del plástico, al tesoro americado reduce la impresión de billetes

El día de ayer The New York Times, publicó un interesante artículo en donde nos explica como causa de la popularización del pago con tarjetas de crédito/débito en los Estados Unidos, el departamento del tesoro está imprimiento menos billetes, por ejemplo la emisión de billetes de cinco dólares se redujo en 2010 hasta su volumen más bajo de los últimos 30 años, mientras que los de 10 dólares no fueron emitidos en general. Por otro lado año pasado casi el 36% de los servicios de taxi fueron pagados con tarjeta, mientras que en algunos restaurantes ya cuelgan carteles donde pone que no se acepta dinero en efectivo.

Sin embargo parece descabellado que la gente hable que estamos enfrentando inflación porque la Reserva Federal de Estados Unidos está imprimiendo muchos dólares y por otro lado veamos noticias como está que reporta que se está imprimiendo menos billetes, lo cual es cierto. Pero la cantidad de circulante en el mundo no está determinado por la cantidad de billetes dólares disponibles, sino por la cantidad de instrumentos de crédito disponible como bonos del tesoro, líneas de crédito y por lo general todas las formas de crédito existente. Nuestras sociedades han evolucionado de tal modo que el dinero es prestado sin que este exista, en la esperanza de que la economía se expandirá infinitamente. Una suposición peligrosa y que de no ser por la inyección de 700 mil millones de dólares a los bancos, gracias al programa de rescate aprovado por la administración Bush en el 2008, todo el sistema económico existente hubiera desaparecido.

Un dato que debemos considerar es el hecho de que sólo existen 4 millones de millones de dólares en forma de billetes, sin embargo el tamaño de la economía estadounidense (PIB) es de 14 millones de millones y en ese orden de magnitud va la economía China y luego la Europea. Ya el dinero no está respaldado por oro, sino que es dado a crédito en existencia bajo la suposición de que la economía seguirá creciendo ilimitadamente, cuando esto no ocurre y se sigue creando crédito más alla del límite de la economía (como ocurre en Brasil o China por ejemplo), se crea inflación sin que sea necesario que el gobierno imprima el dinero, ahora sólo basta pasar la tarjeta de débito o crédito por el punto de venta para crear el dinero.